El hombre cree lo que ve y se fía de aquel que le da
confianza y cumple lo que promete. Por eso, nuestro Señor Jesús hizo muchos
milagros que correspondían con su Palabra. Lo que decía tiene cumplimiento,
hasta el punto que su Muerte tuvo la respuesta de su Resurrección.
Sin embargo, a pesar de sus obras y su Palabra, muchos
hombres se resistieron a creerle, y hoy, todavía muchos se siguen resistiendo.
No es cuestión ya de creer, porque hay razones para ello, sino de que el hombre
se resiste a aceptar la Cruz y morir. Es decir, no acepta negarse, ni tampoco está dispuesto a
perder esta vida. Cree que su felicidad está en ella.
La cuestión se
esconde que negándote encontrarás lo que buscas. Y se trata de negarte porque
el amor, para ser verdadero y auténtico amor necesita sacrificios, renuncias y
entrega. Sólo dándote gratuitamente por amor estás en disponibilidad de imitar
a nuestro Señor Jesús, que por amor se entregó por todos nosotros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.