jueves, 16 de junio de 2016



Jesús nos recomienda un espíritu filial reconociendo al Padre como nuestro Señor y dándole alabanzas y santificando su Nombre. Jesús nos enseña, con su Vida y ejemplo, sus obras, hacer la Voluntad del Padre y vivirla haciéndola presente en nuestras vidas.

Pero, también, nos enseña que hacer la Voluntad del Padre es, no sólo hacer buenas obras, sino tener misericordia con los hermanos, sobre todo con los enemigos, los más pobres y marginados. Una misericordia que nos lleve a perdonar como también nosotros somos perdonados. 

Jesús, ya en el desierto, al comienzo de su Vida pública, nos ha enseñado y dado ejemplo y testimonio de resistirnos a las tentaciones del demonio. Él fue asistido por el Espíritu Santo, y nosotros también lo tenemos a nuestro lado para dejarnos auxiliar por Él y resistir los embastes del Maligno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.