Tu propia estima te conducirá a ocupar lugares más arriba que otros, porque te crees con derecho a ello. Sin embargo, si te indican que debes descender unos peldaños te enfadas, porque tú piensas que eres más grande que el otro.

¿De dónde sacas tu propio? ¿Acaso crees que vales más que el otro? ¿Quién te ha dado lo que tienes? ¿Has sido tú el autor de tu propia vida, de tu inteligencia, de tu cuna y bienes?

Conviene pensar un poco y colocarte humildemente en los últimos puestos, pues quien tiene derecho a eso te llamará si cree que debes estar más arriba. A ti no te corresponde decidir nada. Todo se te ha regalado.