No es cuestión de pensar, porque no lo vas a entender. Sin embargo, hay mil y una razónes que te dan fe de su existencia y también de su Amor. La historia de Jesús es apasionante e intachable. Sus Palabras dan razones que coinciden con las que guardas en tu corazón. Y sus deseos son los que tú deseas. Por eso, Él te los ofrece.
Su testimonio no se queda solamente en la Palabra, sino que aterriza en las obras y soluciona tus problemas. Su vida es un rosario de buenas obras y de milagros por el bien del hombre. No se entiende que muchos, sobre todo los poderosos, hayan rechazado su Mensaje y su Amor.
Sobre todo porque lo que buscan es lo que les ofrece Jesús. Quizás la soberbia tiene mucho más poder que el que nosotros pensamos.
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